Igual que haces un estudio de mercado cuando compras un móvil nuevo, a la hora de adquirir una consola tienes que tener en cuenta varios elementos básicos:
El catálogo: ¿qué cantidad de juegos que tiene? ¿Puedo jugar a mi saga de juegos favorita? Da igual que una consola tenga las mejores prestaciones o sea la más asequible si no tiene juegos de nivel o calidad suficiente para el público que los va a utilizar.
Microsoft, Sony y Nintendo cuentan con sus propias franquicias de juegos que no pueden utilizarse en otras consolas, pero además sus catálogos se completan con títulos creados por terceras compañías que están disponibles para todas las máquinas. (Ej,: FIFA, Call of Duty, Grand Theft Auto (GTA), Just Dance…)
Prestaciones: ¿cuál es la consola más potente del mercado? Debes analizar las características técnicas y las posibilidades a la hora de jugar: la potencia, el nivel visual, los gráficos, el sonido envolvente y las mejores capacidades para el juego a través de internet.
Movilidad: al igual que hay gente que prefiere ver contenido en una tablet antes que en un televisor para poder tener libertad de movimientos, también habrá quien le guste jugar en cualquier lugar y en cualquier momento, por lo que lo ideal para ellos es una consola portátil.
Edad: hay que tener en cuenta quién se va a poner a los mandos de la consola. Si va a ser un niño, un adolescente o un adulto. Cada edad tiene unas necesidades y unos intereses diferentes en lo que a gaming se refiere.