Los locutorios telefónicos móviles son un elemento cotidiano de nuestras vidas, pero ¿sabes cómo se originaron? ¿sabes cómo evolucionaron durante el siglo XX hasta convertirse en elementos indispensables para las comunicaciones de nuestro país? En este artículo, de Historias de Telefónica, exploraremos la trayectoria del locutorio móvil desde sus orígenes, hasta su declive. Y cómo los locutorios cambiaron la forma de comunicarnos en nuestra sociedad.
¿Qué es un locutorio?
Un locutorio o centro de llamadas, es un local comercial que ofrece el servicio de llamadas telefónicas. A principios del siglo pasado, no era habitual tener un teléfono en casa, y los pocos que contaban con teléfono, sólo podían hacer llamadas locales. De ahí que los locutorios fueran provistos por las empresas telefónicas nacionales, con al menos, uno en cada municipio, donde los vecinos pudieran efectuar llamadas.
Desde los primeros momentos del desarrollo de la telefonía, se dispusieron locutorios públicos atendidos por operadoras. Tenían «cabinas telefónicas» que facilitaban la intimidad de las comunicaciones y desde donde se podían establecer las conferencias urbanas o interurbanas.
Uno de los primeros ejemplos de Telefónica se produjo en 1926. Se crearon locutorios en las estaciones de ferrocarril, como en las estaciones madrileñas de Norte y del Mediodía.
Historia de los locutorios en España
Más allá de los locutorios situados en centrales u oficinas comerciales, los primeros locutorios móviles se instalaron, en los años 70, de la mano de Telefónica. Rápidamente se convirtieron en una parte importante de la vida urbana.
Los locutorios permitían, a las personas, hacer llamadas telefónicas desde cualquier lugar, y eran especialmente populares entre las personas que no tenían teléfonos fijos en sus casas.
En los 80, con la llegada de los teléfonos móviles, los locutorios se hicieron aún más populares. Los móviles, en aquella época, eran caros, grandes y las llamadas tenían un precio elevado, por lo que estos espacios, eran una forma asequible de hacer llamadas y de no cargar con los equipos móviles. A mediados de los 80 existían ya 184 locutorios estivales a lo largo de la geografía española.
En los 90, con la llegada de Internet, sumado a que los móviles empezaron a tener una alta penetración, ya no era tan necesario un espacio donde poder efectuar llamadas de voz. Es así como los locutorios se empezaron a convertir en una reliquia del pasado.
Sin embargo, muchos de ellos, se reconvirtieron en ciber cafés. Los clientes podían conectarse a internet o jugar online desde un ordenador pagando un importe por horas. Esto llevó a una nueva época dorada, que se extendió hasta que las conexiones a internet se popularizaron en todos los domicilios de nuestro país, a principios de siglo XXI.
Hoy día, todavía existen locutorios y siguen siendo una opción popular para las personas que necesitan hacer llamadas telefónicas a larga distancia. Sin embargo, su época de esplendor quedó relegada por la incipiente omnipresencia de los teléfonos móviles.
Los locutorios móviles de Telefónica
Para acercar el servicio de telefonía fija a la población, sobre todo en época estival, en 1972 se establecieron locutorios en las playas más concurridas de nuestro país. Estos estaban destinados a atender la demanda estacional junto al 600.
Ese año, el número de teléfonos públicos alcanzaba la cifra de 133.296. Y es que, recordemos que, en los años 70 la penetración de la telefonía era de apenas el 16% de la población, con poco más de 5 millones de teléfonos instalados, frente a una población de 35 millones de habitantes.
Además, muchas poblaciones sólo contaban con una cabina (que empezaban su despegue comercial) para que los habitantes pudieran efectuar sus comunicaciones.
Ese mismo año, se inició una intensa actividad para dotar a Telefónica de equipos móviles que permitieran atender situaciones de emergencia. También permitían dar servicios de calidad en aquellos acontecimientos que requerían una especial actuación en cualquier lugar del país, por apartado que se encontrara. Un ejemplo, fue dar conexión telefónica a los periodistas que cubrían actos de masas, como acontecimientos deportivos o espectáculos. Así es como surgieron los locutorios móviles.
El primero de esos locutorios funcionó, por primera vez, en la Vuelta Ciclista a España de 1972. Se trataba de «contenedores» que daban comunicación a camiones y autobuses que transportaban los locutorios móviles, lo que permitía su entrada en servicio en cualquier sitio.
Hoy en día, la responsabilidad social es algo común y las empresas buscan reducir el impacto medio ambiental de su actividad. Sin embargo, resulta curioso y visionario, que ya en los años 70, Telefónica, y coincidiendo con la puesta en marcha de este servicio de locutorios móviles, pusiera en vigor normas de régimen interno para reducir, a valores inapreciables, la contaminación atmosférica y sonora que los locutorios móviles pudieran producir con su actividad.
Los locutorios móviles, en los años 80, eran un fenómeno relativamente nuevo. Los primeros teléfonos móviles se introdujeron en la década de los 70, pero eran muy costosos y no eran muy prácticos. En los años 80, los teléfonos móviles se hicieron más asequibles y prácticos, y empezaron a ganar popularidad.
Los primeros locutorios móviles eran grandes y voluminosos, y no eran muy portátiles. Se utilizaban principalmente en vehículos, y no eran muy convenientes para usar en otros lugares. Sin embargo, a medida que la tecnología de los teléfonos móviles fue mejorando, los locutorios móviles se hicieron más pequeños y portátiles. Esto los hizo más convenientes para usar en una variedad de lugares, incluyendo en la calle y oficinas comerciales.
En los años 80, estos espacios se utilizaban principalmente para realizar llamadas telefónicas. A medida que la tecnología fue mejorando, empezaron a ofrecer otros servicios como mensajes de texto, acceso a Internet y navegación GPS. Estas nuevas funciones hicieron que los locutorios móviles fueran aún más populares, y ayudaron a revolucionar la forma en que nos comunicábamos.
Las oficinas móviles de Telefónica en los 80
En los años 80, con el objetivo de acercar la atención comercial a los abonados, Telefónica lanzó un servicio de oficina móvil para cubrir las necesidades de poblaciones donde no existían oficinas de atención a los abonados.
Y es que, recordemos que, en aquella época, a diferencia de ahora, que la atención es telefónica o por internet, la atención a los clientes se prestaba en espacios físicos.
Durante 1985, Telefónica empezó a estrechar las relaciones con sus abonados y usuarios poniendo en funcionamiento las 6 primeras Oficinas Móviles de Atención e Información. Estas oficinas estaban destinadas a lograr un mayor acercamiento de Telefónica a las zonas rurales. Además, integraban distintos servicios, más directamente relacionados con las necesidades de los usuarios, consiguiendo de este modo, una mayor eficacia y rapidez en la atención.
La oficina consistía en un autobús adaptado como oficina móvil. Este bus recorría los pueblos de la geografía española y se situaba en un lugar destacado o preferente de la población visitada. Dentro disponía de puestos dedicados a los agentes comerciales de Telefónica, para prestar atención comercial durante unos días.
Las oficinas móviles han venido siendo usadas de manera activa por Telefónica hasta nuestros días como elemento de apoyo y refuerzo para campañas comerciales. El despliegue de fibra óptica en el entorno rural, es un ejemplo. Estas oficinas permiten comprobar la velocidad de subida y bajada de vídeos en HD, conocer la disponibilidad de fibra. También permite saber cuánto estará previsto que llegue hasta su hogar, conocer la mejor oferta de Movistar y hacer la contratación del servicio “in situ”.
Esperamos, que un mes más, este Historias de Telefónica sobre el locutorio móvil, os haya resultado interesante.